Arañas buscando casa
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Valores
- Igualdad
Enseñanza
Un cuento para promover la igualdad en las tareas del hogar desde la corresponsabilidad y el cariño, y teniendo en cuenta las diferencias.Ambientación
Una casa cualquieraPersonajes
Una araña y varias familiasAbajo tienes el texto del cuento y un enlace para descargarlo. Úsalo para trabajar el desarrollo emocional y cognitivo de tus niños o tu bebé, y ayudarte en tu labor de padre o madre
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Cuento
El largo curso en la escuela de arañas había terminado. Por fin las jóvenes arañas estaban listas para salir en busca de su nuevo hogar.
Mientras preparaban la expedición, los maestros repetían la norma básica una y otra vez:
- Buscad una familia con ambiente de igualdad. Recordad, son familias más felices, y si os atrapan tendréis muchas más posibilidades de salir vivas.
El grupo de arañas pronto encontró una primera casa. Ñaki, una de las mejores alumnas, confirmó enseguida de qué tipo se trataba: era una familia “papá al sofá, mamá a la cocina” de auténtico manual, la más peligrosa de todas. Como era de esperar, la mamá y las chicas hacían casi todas las cosas, y cuando se les ocurrió pedir ayuda, los chicos se negaron a hacer nada que fuera “cosas de chicas”. ¡Y para ellos todo era cosa de chicas! Ñaki lo tenía claro, esa era la prueba definitiva de la falta de igualdad y de cariño. Si la atrapaban en aquella casa, le esperaría lo peor.
Siguiendo su viaje encontraron una familia distinta, donde chicos y chicas hacían todas las tareas. Las repartían con tanta exactitud, que no parecía haber mejor prueba de igualdad. “Hoy te toca a ti, mañana me toca a mí”, “Aquí, nadie es esclavo de nadie, yo hago lo mío, tú haces lo tuyo” decían. Pero Ñaki no quiso precipitarse, y siguió observando a tan igualísima familia. Le preocupaba la falta de alegría que observaba, pues se suponía que una familia con tanta igualdad debía ser muy feliz. Pero como todos hacían de todo, todos dedicaban mucho tiempo a tareas que no les gustaban, y de ahí su falta de alegría. Así que, aunque algunas arañas se quedaron allí, Ñaki decidió seguir buscando. Y acertó, porque aquella familia tan preocupada por repartir todo tan exactamente no pudo mantener un equilibrio tan perfecto durante mucho tiempo. Y así, olvidando por qué vivían juntos, terminaron repartiendo también la casa entre grandes disputas, y no se salvó ni una sola de las arañas que se habían quedado.
No tardó Ñaki en encontrar otra familia con aspecto alegre y feliz. A primera vista, no parecían vivir mucho la igualdad. Cada uno hacía tareas muy distintas, e incluso las chicas hacían muchas de las cosas que había visto en aquella primera familia tan peligrosa. Pero la alegría que se notaba en el ambiente animó a la araña a seguir investigando. Entonces descubrió que en esa familia había una igualdad especial. Aunque cada uno hacía tareas distintas, parecía que habían elegido sus favoritas y habían repartido las que menos les gustaban según sus preferencias. Pero sobre todo, lo que hacía única esa familia, era que daba igual si chicos o chicas pedían ayuda, cualquiera de ellos acudía siempre con una sonrisa. Y cuando finalmente, en lugar de “tareas de chicos o chicas”, o “tareas tuyas o mías”, escuchó “aquí las tareas son de todos”, se convenció de que aquella era la casa ideal para vivir.
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Comentarios
A mi hija y a mi nos encanto
A mi hija y a mi nos encanto el cuento ademas nos hemos dado cuenta que la ultima familia es como la nuestra
Este cuento es muy propicio,
Este cuento es muy propicio, para que nuestros peques aprendan y vivan lo valores, pero lo màs imprtante les mostremos como practicarlos.
La idea me parece buena, pero
La idea me parece buena, pero me sobra el comentario del final de "e incluso las chicas hacían muchas de las cosas que había visto en aquella primera familia tan peligrosa", porque está implicita el que muchas de las cosas de casa son cosas de chicas.
Insisto la idea me parece muy buena, pero sin dar por sentado nada.
Además las tareas de casa hay que hacerlas guste o no, se puede llegar a un equilibrio e intentar buscar lo que nos guste, pero siempre habrá algo que no guste, e igualmente deberá hacerse entre todos.